Ejeje, este es un título con “gancho”.
El sábado pasado compré una esfera de cristal en el barrio chino y el domingo siguiente comencé a sacar fotos a través de la bola. Me fui entusiasmando cada vez más, comencé en el living, salí al balcón, luego volví al living, bajé por el ascensor y continué sacando hasta llegar a la Placita Serrano, luego volví de noche.
Me pareció maravilloso el efecto de la esfera como si fuera un lente “ojo de pez” pero también eso de tener el paisaje en la mano, como si todo el universo cupiera dentro de la bola de cristal. Luego las giré digitalmente para que se comprenda el paisaje, dejando en segundo plano e invertido, lo que estaba detrás.
Acá está el resultado. Ver en pantalla completa.